Vistas de página en total

sábado, 8 de febrero de 2014

El Cielo de tu Rostro (2012)


Me encuentro contigo, 
domadora de reyes 
que se tornan borrosos 
en los recovecos asombrosos 

De aquel camino 
que muchos osan 
llamar destino, 
el cual serpentea 

Despojando de cordura 
a todo aquel que, 
aún dentro de su investidura, 
hace a un lado sus miedos, 

y se aventura 
Como caída en picada, 
a la marea fortuita 
del atardecer ardiendo.

Enérgico, 
como el canto de aquel ave 
que te vio llegar, 
que reparó en nuestros pasos, 
como los retazos

Que, uno a uno, 
fueron componiendo este cuento 
que, si bien no es perfecto 

y tampoco es para niños, 
la enseñanza a la que me ciño 
es algo que no se le quita.

Me gusta el cielo de tu rostro, 
porque tiene dos lunas 
rodeadas de estrellas, 
que se hacen más bellas 
cuando llega el amanecer. 

Y en aquel atardecer, 
voy a verte una vez más, 
luego de la dulce retahíla, 
para amanecer contigo 
y que no importe nada más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario