Tu esperanza con la mía
se encontraron al mercado,
y ante tal altercado
cometí la fechoría
de tenerte aquí a mi lado.
Abandonar la prosa
y las caricias medievales.
El silencio de estampida
que embiste mis arrabales.
La ginebra adolorida
que besaba todos mis males.
Si te quitas la camisa
y te recito en otro idioma.
Si escalamos por la brisa
y tu falda se desploma.
Si el aroma de tus ojos...
si los ojos de tu aroma...
Si me quitas la camisa
jugaré con tus dolores.
Uno a uno, los botones
que reboten en tu pelo.
Luego vete por dos días
y si escribo, no respondas...
luego búscame en las sombras,
y si escribo, no te opongas.
Si me quieres es completo
si no me quieres, no lo digas
me gustarás más todavía.
Y entre prosa y poesía
se me colarán los besos.
José Tedesco
No hay comentarios:
Publicar un comentario